Se cumplen setenta y cinco años desde que Antonio Machado falleciese en la localidad francesa de Colliure, un bello pueblo del sur. Su tumba, que se encuentra a la entrada del cementerio recuerda a todos aquellos que tuvieron que salir por la guerra civil hacia el exilio y nunca más volvieron.
Es curioso cómo recibe aún flores, placas, visitas o cartas con el remite de su persona y la localidad.
Desde nuestro centro le rendiremos homenaje esta primvara con una ruta literaria por Baeza.
"Esos días azules y este sol de la infancia..."
Tal vez deberíamos pensar en la posibilidad de crear un enlace de obituarios porque alcanzamos una nada deseada racha de grandes escritores que en un corto espacio de tiempo nos han dejado. En esta ocasión uno de los más excelsos autores mexicanos como fue José Emilio Pacheco. Nos sirve este pequeño homenaje para saludar a nuestros seguidores allende el Atlántico, gracias por conocernos. 
